Alguien nos seguía de cerca
No pedía compasión
Alguien nos seguía de cerca
Alguien se murió
Encontramos otro camino para andar
Ya sin gritos
Solo necesitábamos avanzar
Queríamos girar para ver si atrás de nuestras esperanzas
Habíamos dejado todo el pasado
Sin nada ya nos seguía
Sino el ritmo de nuestros latidos
Tu mano pequeña y la mía
Caminaban desde ahora juntas
La tormenta nos llamaba y nos alejaba
El viento soplaba fuerte
Y yo no quería dejar tu mano
No quería dejar tu mano
1 comentario:
Ojalá nadie suelte mi mano en una tormenta, me ha encantado, preciosa como siempre.
Saluditos desde mi mundo.
Publicar un comentario